domingo, 25 de junio de 2017

evangelio del domingo

SEÑOR, CONTIGO A MI LADO NO TEMO
En aquel tiempo dijo Jesús a sus apóstoles:” No tengáis miedo a los hombres..” no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma...Mt.10,26-33
ENTRA EN TU INTERIOR
No tengáis miedo, nos dices hoy en el evangelio, “no temáis, y la razón por la que no temer no es otra que el Padre cuida de nosotros.
El miedo es un sentimiento humano, ¿quién no ha experimentado el miedo y el temor?, cada uno de nosotros por cosas distintas, de mayor o menor importancia dependiendo de la edad en que lo experimentemos. De pequeños tal vez el miedo a la oscuridad a la hora de ir a dormir... pero llegaba nuestra madre o padre y nos susurraba – no temas, no tengas miedo papa (o mama) están a tu lado, no te va a pasar nada. Y nosotros confiábamos en su protección y amor y experimentábamos la calma.

Hoy Jesús nos dice, no tengáis miedo, el Padre cuida de vosotros, y nos invita a tener confianza, porque la confianza es la mejor arma contra el miedo y el temor. Vivir con miedo es paralizante, pero el miedo es existencial, desde que nacemos pasamos la vida temiendo, adelantando acontecimientos, con miedos más o menos imaginarios. Jesús nos invita y nos da ejemplo de valentía, no estamos solos tenemos al Padre que cuida y cuidará de cada uno de nosotros.


domingo, 18 de junio de 2017

CORPUS

HAMBRE DE TI – CÁLIZ BENDECIDO Y PAN PARTIDO
En aquel  tiempo, dijo Jesús  a los judíos:  “Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que  coma de este pan vivirá para siempre. Y  el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo”...  
Juan 6,5-58                                                                                                                             
ENTRA EN TU INTERIOR

El relato tiene un trasfondo eucarístico: pan, comer, carne, sangre, beber, vivir,  vida eterna, vida verdadera, Yo soy el Pan de Vida...  La Eucaristía, es un acto de comunión con Dios; comulgamos el cuerpo de Cristo, su palabra y su vida: su manera de ser, sus prioridades, sus preocupaciones, su estilo de vida...  El pan que nos da el Señor es su Cuerpo y Sangre para la vida del mundo, un pan que se parte y se comparte en la gran mesa redonda de la humanidad. Cristo por Amor se ha quedado con nosotros, hecho Palabra y Sacramento, misterio y Presencia. La Comunión del Cuerpo de Cristo y de su Palabra, no puede separarse de compartir nuestro pan de la tierra, nuestro tiempo, nuestras competencias... para tratar de paliar con la aportación de nuestro granito de arena a la construcción de un mundo cada día más justo, para cooperar a que todos tengan vida y vida en abundancia.

PROCESION CORPUS